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Sobre la Receta
Las alitas búfalo son un clásico irresistible para cualquier ocasión, ya sea como aperitivo en una fiesta o como platillo principal para una comida casual. En esta receta, le damos un toque único con la salsa ANGU, que le aporta un sabor profundo y picante, ideal para los amantes del picante y de los sabores intensos. Al combinar las alitas crujientes con una salsa búfalo hecha a base de salsa ANGU y mantequilla derretida, obtienes un platillo sabroso y lleno de carácter. ¡Acompáñalas con zanahorias, apio y tu aderezo favorito para disfrutar de una experiencia deliciosa!

Ingredientes
Para las alitas:
10 alitas de pollo (puedes usar más o menos dependiendo de cuántas personas sean)
1 cucharada de aceite de oliva
1 cucharadita de sal
1/2 cucharadita de pimienta negra
1/2 cucharadita de ajo en polvo
1/2 cucharadita de paprika (opcional, para un toque extra de sabor y color)
1 cucharada de vinagre blanco (opcional, para marinar)
Para la salsa búfalo:
100 ml de salsa ANGU (la cantidad puede ajustarse dependiendo de cuántas alitas estés preparando)
2 cucharadas de mantequilla derretida
1 cucharadita de ajo en polvo (opcional, para intensificar el sabor)
Para acompañar (opcional):
Apio fresco, cortado en bastones
Zanahorias baby, cortadas en bastones
Aderezo ranch o blue cheese, para mojar
Preparación
2. Cocinar las alitas:
Opción 1: Horneado
Precalienta el horno a 200°C (390°F).
Coloca las alitas en una bandeja para hornear, asegurándote de que no estén amontonadas (puedes usar una rejilla para permitir que el aire circule mejor y queden más crujientes).
Hornea las alitas durante 30-40 minutos, volteándolas a la mitad del tiempo para que se cocinen uniformemente. Si te gustan más crujientes, puedes hornearlas unos minutos más.
Opción 2: Fritura (si prefieres más crujientes)
En una sartén profunda, calienta suficiente aceite para sumergir las alitas. La temperatura del aceite debe ser de 180-190°C.
Fría las alitas en pequeñas cantidades durante 8-10 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes por fuera y cocidas por dentro. Usa un termómetro de cocina para asegurarte de que la temperatura interna de las alitas llegue a 75°C.
Retira las alitas y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.
3. Preparar la salsa búfalo:
En una cacerola pequeña, mezcla la salsa ANGU con la mantequilla derretida. Si quieres un toque más sabroso, puedes agregar una cucharadita de ajo en polvo.
Calienta la mezcla a fuego bajo, revolviendo constantemente hasta que se integren bien la salsa y la mantequilla. No dejes que hierva, solo que se caliente y emulsione.
4. Cubrir las alitas con la salsa:
Coloca las alitas ya cocidas en un tazón grande.
Vierte la salsa búfalo (salsa ANGU con mantequilla) sobre las alitas y mezcla bien para que se impregnen completamente.
5. Servir:
Sirve las alitas de inmediato, acompañadas de apio y zanahorias cortadas en bastones.
También puedes acompañarlas con un aderezo ranch o blue cheese para mojar.
Consejos:
Si te gusta un toque extra picante, puedes agregar un poco de salsa picante adicional a la mezcla de salsa ANGU y mantequilla.
Si prefieres alitas más suaves, reduce la cantidad de salsa ANGU o mezcla un poco con miel para balancear el sabor.
¡Y listo! Ahora tienes unas deliciosas alitas búfalo preparadas con la salsa ANGU. ¡Perfectas para disfrutar como aperitivo o para una comida informal!